UN LADRÓN POCO AVEZADO
En un medieval mercado
hurtó un saco de avellanas
un ladrón, pero, al momento,
por correr más de la cuenta
tropezó con una piedra,
y del saco se salieron
la mitad más una de ellas.
Más tarde, subiendo un cerro,
perseguido por un perro,
volvió a perder - buen lector -
la quinta parte de ellas
más veinticinco avellanas.
Y antes de llegar a casa
se encontró con un amigo,
al cual dio la quinta parte
de las que en el saco había.
Con trescientas avellanas
llegó a su casa - lector -.
¿ Cuántas avellanas, pues,
aquel saco contenía
- claro está - cuando lo hurtó ?
( Creado por Florentino Alejandro Rincón Zapatero,
en dieciocho de diciembre de dos mil veintitrés )
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